De Carranza a Cárdenas



Hoy les traigo un poco de historia. Si no les fascina la historia, ni lo lean.

Entre 1911 (año en el que termina el gobierno de Porfirio Díaz) y 1920, México vio diez cambios de presidente, algunos más repentinos que otros. Hoy no les voy a contar del caos que fueron esos años si no de lo que pasó después que algunos consideran que todavía entra en el periodo de la Revolución mexicana.

Verán, cuando iba a terminar su periodo presidencial, Venustiano Carranza impulsó (quiso imponer vaya) la candidatura del exembajador de Estados Unidos, el ingeniero Ignacio Bonillas, argumentando que México había tenido suficientes presidentes militares, lo cual no fue recibido con mucho entusiasmo por parte del general Álvaro Obregón que quería ser el próximo presidente del país y tenía una gran cantidad de aliados y simpatizantes entre ellos el general Plutarco Elías Calles y mi bisabuelo, el licenciado Gilberto Valenzuela Esos tres al menos, eran sonorenses al igual que la mayoría de los aliados de Obregón.

Esto ocasionó que hubiera algunos levantamientos en Sonora, que eventualmente serían aceptados en el resto del país. El 23 de abril de 1920 se proclamó el Plan de Aguaprieta (redactado por el mismísimo Gilberto Valenzuela) que desconocía el gobierno de Carranza (entre otras cosas menos importantes). Los insurgentes contaban con el apoyo de la mayoría del ejército mexicano y no tardaron en dar con Carranza y asesinarlo.

Ahora hacía falta un presidente en el país. En lo que se convocaban y organizaban elecciones, fue nombrado presidente provisional Adolfo de la Huerta (que no duró ni un año, pero bueno). Durante su breve gobierno, nombró subsecretario de gobernación a Gilberto Valenzuela pero este ocupó dicho cargo durante poco tiempo, pues tuvo que ir a Francia a continuar sus estudios (estaba joven todavía). Se hacen las elecciones y es electo Álvaro Obregón.

Durante su gobierno, fundó junto con José Vasconcelos, la Secretaría de Educación Pública, reprimió legalmente a la Iglesia católica y nombró secretario de gobernación a Gilberto Valenzuela quien de nuevo, no duró mucho en dicho cargo. Muchos años después, admitió que su renuncia al puesto se debió a que descubrió evidencia según la cual Obregón había estado implicado en el asesinato de Pancho Villa, aunque la razón oficial fue por la violencia que había en el momento en el país y lo mandaron como embajador a Bélgica. Al terminar su periodo presidencial, apoyó a Plutarco Elías Calles como sucesor. Ganó.

Plutarco Elias Calles también nombró a Gilberto Vaenzuela secretario de gobernación. Calles y Valenzuela tuvieron sus diferencias, la más potente de las cuales causó la renuncia del Licenciado. Calles había impuesto a Carlos Riva Palacio como gobernador del Estado de México. Valenzuela consideraba que Calles estaba rompiendo con los acuerdos del Plan de Aguaprieta Sufragio Efectivo, no reelección. Hay un diálogo muy famoso entre esos dos en el momento en que Valenzuela presenta su renuncia:

Calles: “Licenciado, yo no le he perdido la confianza…”

Valenzuela: “Hay dos casos en que la renuncia del un Secretario de Estado se impone. Cuando el presidente ha perdido la confianza a su Secretario y cuando es el Secretario quien ha perdido la confianza en el Presidente. Acepte usted mi renuncia por el segundo de estos casos”....

Calles aceptó su renuncia y Valenzuela fue nombrado embajador en Londres. 

Él fue el responsable de la Guerra Cristera, conflicto armado entre el gobierno y la religión católica que dejó miles de muertos y durante su gobierno, logró que se permitiera la reelección no inmediata de tal manera que su compañero del alma, Álvaro Obregón podría ser de nuevo el presidente. A Obregón se le trataron de oponer el general Francisco Serrano (que me comenta mi abuela que sí es pariente mío, también conocido conocido como la mano derecha de Obregón) y Arnulfo R. Gómez. Serrano era la opción lógica e inicialmente creía que contaría con el apoyo de Calles y Obregón, sin embargo, cuando resulta que Obregón quería reelegirse y lo que es más, que no podría por culpa de Serrano, Obregón manda a fusilar a sus opositores. Ganó las elecciones de 1928.

Pero Álvaro Obregón tenía más enemigos en la Iglesia. José de León Torral se le acercó un día, antes de que empezara su nuevo periodo presidencial con el pretexto de enseñarle una caricatura y le disparó seis tiros, según esto que porque la madre Conchita había dicho que "ojalá alguien lo mate". Recordemos que Obregón ayudó a Calles a perseguir a la Iglesia.

De nuevo, se necesitaba un presidente. Cuando Gilberto Valenzuela regresó de Londres, todo el mundo pensó que él sería el elegido de Calles. Y lo fue. Calles le ofreció ser el candidato del nuevo partido PNR (que luego se convertiría en el PRI) sin embargo él rechazó la oferta y se lanzó como candidato de la oposición. Calles desterró a Valenzuela antes de las elecciones en las que José Vasconcelos perdió contra Emilio Portes Gil.

Ahora sabemos cuáles eran los verdaderos planes de Calles y la razón por la que Gilberto Valenzuela rechazó ser su candidato: Calles quería tener el control verdadero de la presidencia y que el presidente de México fuera sólo su títere. A su gobierno siguió un periodo de seis años conocido como el Maximato, durante el cual hubo tres presidentes, los tres sonorenses, los tres títeres de Calles y los tres sólo duraron dos años cada uno antes de que el mismo Calles los obligara a renunciar: Emilio Portes Gil, Pascual Ortiz Rubio y Abelardo L. Rodríguez. Cuando este último abandona la presidencia, Calles tenía planeado seguir con este esquema y apoyó a Lázaro Cárdenas con quien parecía tener un entendimiento similar. No obstante, parece que Cárdenas traicionó a Calles y lo mandó al exilio en Estados Unidos.

En 1935, Lázaro Cárdenas le permite a Gilberto Valenzuela regresar de su exilio en Estados Unidos.

Si llegaron hasta aquí, dejen un comentario, nos vemos la próxima :)



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