Epílogo de Playa

Pues ayer regresé de Playa del Carmen, me la pasé increíble y como sucede en los viajes, uno aprende muchas cosas. Algunas se aprenden conviviendo con gente nueva, otras se aprenden cuando se cometen errores (aunque sean los errores de los demás). Hay algunas cosas que quiero escribir, simple y sencillamente porque quiero poder decir que están en mi blog; algunas recomendaciones que si alguien llegara a no seguir, podría yo contestarle con un "cómo se nota que no lees mi blog" de lo más nefasto. Así que ahí les voy con una mezcla de recomendaciones de vida basadas en mi tiempo en Playa del Carmen.

Algo que me he dado cuenta es que frecuentemente se pueden distinguir a los locales por su vestimenta: si hace calor, los locales están acostumbrades y usan pantalones, no shorts como los turistas y definitivamente no traje de baño. Al menos no diario. Yo en Playa del Carmen, usaba mi traje de baño diario porque siempre existía la posibilidad de nadar y estando allá, quería aprovechar. Pues bien, Ana siendo local, no siempre usó su traje de baño así que no tuve otra alternativa más que aventarla a una alberca con todo y ropa. A mí me pareció muy gracioso. A ella no tanto. Así que ya saben: si están en la playa, lleven traje de baño.

Otro error cometido durante mi tiempo por allá: para celebrar nuestro aniversario, Ana y yo compramos una botella de vino y yo traté de abrirla con el destapacorchos de mi navaja suiza. Para no hacerles el cuento largo, rompí la navaja, el destapacorchos se quedó atorado dentro del corcho y tuvimos que ir a un restaurante que quedaba cerca a que nos ayudaran a abrir la botella. A Ana le pareció muy gracioso... La verdad es que a mí también. Pero no es algo que necesariamente quiera repetir así que saben: no usen el destapacorchos de sus navajas y aprendan a abrir botellas.


Un acierto en mis viajes ha sido llevar una bolsita. Estilo cangurera pero yo me la cuelgo del hombro. Es una maravilla. Ahí guardo todo lo que uno debería llevar cuando viaja: cartera, una pluma, un popote reutilizable, un tenedor/cuchara, llaves, una bolsa de plástico, toallita para los lentes, una pila portátil, todo. Muy práctico. Y con el calor que está haciendo ahorita, es mucho mejor que llevar una chamarra para poder usar los bolsillos así que también se los recomiendo aunque no estén viajando.

Este viaje coincidió con la marcha de Pride. Estuvo muy divertida, llena de colores y música y me la pasé muy bien aunque creo que lo mejor para mí fue el grupo de gente con el que fui: Ana y sus amigues de teatro, gente muy linda con quienes me divertí muchísimo. Nos juntamos un día antes para hacer carteles. Mi favorito era el de Johan que decía "Mi familia me enseñó a comer de todo". Me mató de risa y creo que aunque puede ser algo gráfico para algunes de mis lectores, tiene un mensaje muy bonito de tolerancia. Supongo que aquí hay varios consejos: no importa tanto el "qué" como el "con quién", hay que ser tolerantes con todes y siempre hay que probar cosas nuevas.



Por último, no puedo hablar de Playa del Carmen sin mencionar a mi queridísima tía Claudia a quien le he aprendido muchas cosas y podría escribir toda una entrada de blog nada más dedicada a sus enseñanzas pero por hoy sólo les daré uno de sus consejos: no hagas nada si tu única motivación es a) el miedo, b) la obligación o c) la culpa.

Perfecto. Ahora si alguien no hace alguna de estas cosas, les puedo reclamar "¿qué no lees mi blog?". y tendrá sentido. Gracias por su tiempo.

Comentarios

  1. 1) Gracias por la entrada! .
    2) Gracias por no ignorar mi respuesta en la cajita de preguntas "¿de qué quieren que escriba?"
    3) Gracias por las risas y la buena compañia.
    y por último, Gracias por los tips.

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  2. yo agregaría a esta lista:
    No guardar boletos importantes entre folletos de Xcaret, o de ningun tipo de folleto. jejejje

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