La Historia de las Bellas Artes



Si yo hiciera la afirmación "el reguetón es igual o mejor que la música clásica" independientemente de si usted estuviera de acuerdo o no, creo que sentiría algo, adoptaría una postura, tendría una reacción. Alguien diría "claro que sí", alguien diría "por supuesto que no" y habría quienes dirían "es absurda esa afirmación porque son cosas subjetivas que no se pueden comparar así nada más, así que depende en qué aspecto te refieras". Esta última postura no me interesa ahorita. Es la más balanceada, probablemente la más correcta pero ahorita, es irrelevante. 

Pues en 1687, un tipo llamado Perrault hizo una afirmación equivalente. Dijo que los artistas (en ese entonces) modernos eran iguales o superiores en cuanto a calidad que los clásicos (de esa época). Los artistas quedaron en shock por semejante blasfemia. ¿Cómo comparar los nuevos textos, esas cositas que empezaban a surgir llamadas novelas que sólo leían las mujeres con la poesía de Homero? Aunque los textos más recientes fueran más populares, estos artistas sabían que popularidad no es lo mismo que calidad. Los estudiosos sabían reconocer el valor de los clásicos, pues entre más sabe uno, más sabe uno sobre lo que no sabe. Perrault sabía que tenía que justificar su afirmación y lo hizo comparando la física de Galileo Galilei con la de Aristóteles que era inferior. 

Pérame tantito Javier, me dirá usted, ¿qué no estábamos hablando de arte? La física no es un arte, es una ciencia. Pues sí pero verá usted, mi queride lector, que el concepto de "arte" o de las  "Bellas artes" como lo conocemos ahora, no existía en el siglo XVII (en antigua Grecia de hecho, no diferenciaban entre arte y artesanía). No, en ese entonces, tenían las "artes liberales" que incluían la gramática, la retórica, la lógica, la aritmética, la geometría, la astronomía y la teoría musical. Cuando se sale Perrault con sus fuertes declaraciones, la gente se da cuenta de que no pueden agrupar todas esas disciplinas y que necesitan categorizarlas mejor y así empieza el debate de cómo le van a hacer.

Se llega a la conclusión de que se necesitan definir tres cosas: el conjunto, es decir, las disciplinas que entrarán en este nuevo concepto; el término o la palabra que se usará para referirse a este concepto y los principios o criterios con los que se tendrán que cumplir para entrar en esta nueva categoría. Finalmente se aceptaron cinco disciplinas: pintura, escultura, poesía, música y arquitectura. Después entraba la discusión porque cada quien añadía las que opinaba que deberían considerarse como arte también. Se hablaba de danza pero también de jardinería, cerámica, grabado, oratoria y tapicería.

Como término, "Bellas Artes" fue el ganador aunque también se propusieron artes elegantes, artes bien educadas, artes nobles y artes elevadas. Y en cuanto a los criterios, se definió que la creación de artes tenía que implicar genio e imaginación y que tenía que poner la belleza sobre la utilidad. Charles Batteux dijo que entonces la arquitectura debía tener su propia categoría porque era igual de bella que útil y aunque yo estoy completamente de acuerdo con eso, a mí no me consultaron (principalmente, creo yo, porque no estaba vivo en el siglo XVIII) y a Batteux lo ignoraron. Pero hey, al menos dividieron las ciencias de las artes.

Todo esto es del quinto capítulo del libro de Larry Shiner, La Invención del arte.

Comentarios

  1. ¿Cómo te fue en la presentación? esto se lee muy bien, jajaj "artes elegantes" suena sumamente refinado, gran dato!

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