¨Ahí no compres, son de los del Che"

Mis queridísimes lectores. Hoy les traigo mi más reciente dilema moral: comprar comida o no comprar comida. Seré más específico. Como seguramente lo sabrán, recientemente comencé a estudiar Historia en la Facultad de Filosofía y Letras. Creo haberles comentado que fuera de mi facultad, en un pasillo que está al aire libre, uno puede encontrar todo tipo de changarros que venden todo tipo de alimentos. Creo que mencioné las quesadillas, los churros, los tacos y las hamburguesas de falafel. Hay más, pero esos son los que me interesan. 

Pues resulta y resalta que existe un grupo de malechores popularmente conocidos como "los del Che", mismos que tomaron un auditorio de la UNAM hace ya bastantes años y lo ocupan sin mayor causa. No me voy a meter en detalles, principalmente porque no los tengo y en segundo lugar, porque para fines de esta entrada, no son necesarios. El punto es que estos, los del Che, son malos. Las autoridades de la UNAM han sido incapaces de sacarlos y las autoridades externas no pueden intervenir porque eso interferiría con la autonomía de la UNAM. Eso sería terrible. ¿Y por qué son relevantes estos del Che? Porque las personas que venden deliciosa comida en el pasillo fuera de mi facultad son "los del Che".

Según lo que me dijeron, los del Che venden en ese pasillo para mantener su ocupación del auditorio. Luego me explicaron que no era precisamente la señora de las quesadillas la que ocupaba el auditorio sino que los del Che extorsionan a todo aquel que quiere vender en ese pasillo para que le caigan con una lana. En otras palabras, los vendedores le pagan derecho de suelo a los del Che.

Y aquí entra el dilema. ¿Comprar comida o no? Suponiendo que todo esto que me contaron mis amistades sea cierto, que comprar comida en el pasillo apoya a los del Che y que los del Che son malos, ¿que sucede? Hay quienes dicen que no debemos de comprar comida en ese pasillo para no apoyar a los del Che. Analicemos eso: supongamos que logramos boicotear a los vendedores, quiebran y se tienen que ir. ¿No llegarían nuevos vendedores a tomar su lugar? Eventualmente dejarían de llegar vendedores porque sabrían que nadie compra en ese lugar pero ¿Cuántos negocios honestos tendrían que quebrar antes de llegar a ese punto? ¿Tienen la culpa estas personas que ponen sus negocios y pagan derecho de suelo?

Obviamente, lo mejor sería sacar a los del Che, pero eso no se puede, siendo realistas. Es un poco similar al tema de la explotación laboral o de lo que está pasando en Rusia con las medidas que tomaron algunos países que parecen castigar más a los civiles que al gobierno ruso, que son los verdaderamente culpables. Así que acudo a ustedes, mis lectores y les pregunto: ¿Qué se hace? ¿Qué opinan que se debería de hacer en este caso? 

Este es el pasillo en cuestión cuando no está repleto de changarros.